Sin duda alguna, una de las cosas que los invitados esperan con impaciencia es el catering. Es uno de los momentos centrales del evento, en el que se propicia el ambiente óptimo para relacionarse. Por tanto es importante que lo preparemos atendiendo a las siguientes cuestiones:

Ajustarse al presupuesto.

Importante y necesario obviamente. Para ello hay que tener en cuenta el número de invitados, los productos que quieres poner, las personas necesarias para atender al público… Hay que intentar poner lo mejor dentro de nuestras posibilidades y en cantidades adecuadas, aunque eso de calcular es un arte. También hay que evitar el quiero y no puedo, hay ciertos productos en los que se nota mucho la calidad. Así que si no puedes permitirte uno bueno, no pongas uno cualquiera o parecerá que quieres dar una imagen a tu evento que no puedes cumplir en realidad.

Momento del evento.

No sólo la hora sino también la estación del año en la que nos encontremos serán factores decisivos a la hora de elegir el catering que se va a servir. Por supuesto no es lo mismo un evento de día que de noche, ni un evento en invierno que en verano, en donde no podemos escatimar en bebida y productos frescos (por ejemplo el gazpacho es perfecto para ofrecer en verano pero no muy adecuado para las épocas de frío). La mejor opción es elegir productos de temporada que además de tener buenos precios, van muy acordes con el ambiente.

Presentación.

Puedes elegir entre ofrecer el catering en mostradores a los que pueden acercarse los invitados si lo desean o en bandejas que circulen por todo el recinto, decisión tuya. En la presentación de los platos hay cabida para la creatividad pero dentro de un límite. Si no, podemos pecar de excesivos y eso nos será penalizado. Primordial también en este aspecto es la atención al cliente, una presentación adecuada tiene que ir ligada a una buena actitud y presencia de la persona que nos la ofrece.

Lugar de celebración.

Tenemos la gran suerte de vivir en un país muy rico en cuanto a gastronomía se refiere, pues vamos a aprovecharnos de eso. Hay que decantarse por los productos autóctonos. En cada región hay unos productos estrella que no puedes dejar de ofrecer. Como por ejemplo un buen vino en La Rioja, sobre todo si los invitados vienen de otras regiones o países.

Déjate asesorar por la empresa de catering.

Ellos son los expertos y los que mejor sabrán acertar en función de las características de cada evento. Para no equivocarte, elige una empresa con experiencia y vanguardista (que pueda sorprender en sus platos pero sin pasarse, hay que dejar para otra ocasión las apuestas arriesgadas). Para ello, el consejo que te damos siempre, busca en internet, redes sociales, etc, información de sus trabajos y opiniones sobre cómo funcionan. Hoy más que nunca la información está al alcance de nuestra mano y hay que saber aprovecharla.

Ya tienes decidido el catering, pues…  ¡a disfrutar!